Nunca he sido un gran forofo del fútbol. De pequeño lo jugaba de vez
en cuando en el cole y no me lo pasaba mal, pero jamás he sido una
persona que aguantara un partido entero de fútbol sentado delante de la
tele.
Nunca he tenido conocimiento alguno de los equipos, de las
competiciones, de quién está jugando en qué equipo, etc. A veces en el
restaurante alguien me pregunta “¿Qué haremos hoy, ganar o perder?” Y yo respondo “Supongo que ganar” porque trabajo de cara al público y tengo que contestar eso, pero por dentro pienso “Ah, ¿hoy hay fútbol? ¿Quién juega?”.
Como deporte no me desagrada, y no sé qué razones tenía de pequeño
para que no me gustara el fútbol, pero sí sé cual es el principal motivo
ahora que soy mayor para no seguirlo ni ver los partidos en general: la
gente es gilipollas.
La incapacidad de la gente de desvincular el fútbol de otras cosas
(como la política, o los fanatismos hacia un club en concreto, o el odio
desmesurado hacia otros) es lo que hace que me dé rabia el fútbol. Es
la importancia vital que adquiere en la sociedad lo que hace que me dé
un poco de asco.
He visto gente pelearse por una discusión sobre fútbol, he visto
gente insultar a otra por ser de otro equipo, he visto vinculaciones
políticas con el fútbol sin ningún tipo de sentido, he escuchado muchas
conversaciones de gente que “sabía” lo que los entrenadores de fútbol
deben hacer para ganar tal o cual partido, como si ellos fuesen
verdaderos expertos y supieran más que el señor que está sentado en el
banquillo.
He visto ejemplos realmente patéticos como un padre riñendo a su hijo de 6 años porque el niño dijo que de mayor “se haría un tatuaje, como Cristiano Ronaldo”. ¿Sabéis qué le dijo el padre? No fue algo como “Mientras vivas en mi casa no te harás un tatuaje” ni nada por el estilo. Le dijo, literalmente: “A ese hijoputa ni lo nombres, ¿me has entendido?”.
El miércoles vi buen fútbol en mi casa. Sufrí cada vez que alemania
hacía uno de sus contraataques, me levanté y aplaudí con el gol de
España, me reí con mi padre porque justo 5 segundos antes un
comentarista había dicho “¿Meteremos algun gol de corner alguna vez? Yo creo que no”. Pues toma gol, por hablar.
Y ¿sabéis qué fue lo mejor? En mi casa no somos futboleros. Nunca lo
hemos sido. Vi un buen partido de fútbol, me lo pasé bien, y no tuve que
escuchar comentarios como “Mira, el Barça gana a Alemania 1-0″ o “Joder, ya podría marcar un gol alguno del Madrid” ni tonterías de esas. Yo no sé ni qué jugadores son del Madrid ni cuales son del Barça, así que imaginad.
Disfruté de un partido, punto.
No me malinterpretéis. Está muy bien ser seguidor de un equipo de fútbol y entiendo que puedas sentirte triste, alegre o enfadado con un partido. Entiendo la euforia que nos invade cuando nuestro equipo favorito gana un partido importante o algún campeonato. Pero hay niveles y niveles. El fútbol es sólo un deporte. Existe para entretener (y mover muchísimo dinero pero no quiero entrar en ese tema) y hay gente que nunca conseguirá entretenerse.
No me malinterpretéis. Está muy bien ser seguidor de un equipo de fútbol y entiendo que puedas sentirte triste, alegre o enfadado con un partido. Entiendo la euforia que nos invade cuando nuestro equipo favorito gana un partido importante o algún campeonato. Pero hay niveles y niveles. El fútbol es sólo un deporte. Existe para entretener (y mover muchísimo dinero pero no quiero entrar en ese tema) y hay gente que nunca conseguirá entretenerse.
No sé cómo lo hacen esos amargados fanáticos para ver los partidos y
pasárselo bien. Yo sólo les veo quejándose todo el día. Insultando al
contrario, odiando a sus clubes archienemigos… De verdad, no entiendo
cómo pueden disfrutar del fútbol si siempre tienen la vista y la boca
fijadas fuera del campo, distrayéndose con otras tonterías. No sé cómo
son capaces de ver nada con tantas vendas en los ojos.
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